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lunes, 2 de agosto de 2010

MUCHOS EN ESTADOS UNIDOS NO SABEN QUE EN SU PAÍS ANDAN SUELTOS TERRORISTAS CONFESOS

TRAVERSE CITY, Michigan.— Los asistentes a un conversatorio sobre el arte fílmico cubano convocado por el Festival de Cine de Traverse City, en el estado de Michigan, se mostraron conmovidos al saber que Estados Unidos protege a dos terroristas confesos que gozan de libertad en la Florida.

Al intervenir en el coloquio, Juan Carlos Cremata, que trajo aquí su filme Viva Cuba, codirigido por Iraida Malberti, contó cómo "mi padre fue cruelmente asesinado en la flor de su vida en un atentado contra un avión de Cubana de Aviación en 1976 y sin embargo dos de los asesinos confesos de mi padre (Orlando Bosch y Luis Posada Carriles) caminan impunemente por Miami".

Carlos Cremata Trujillo, trabajador de la aerolínea cubana, falleció el 6 de octubre de 1976 a los 41 años de edad, junto a otros 72 pasajeros y tripulantes, al detonar en el aire la nave cubana cerca de las costas de Barbados.

Michael Moore, célebre documentalista y principal promotor del festival, inició el diálogo con una pregunta a la audiencia: "¿Qué nos han hecho los cubanos al pueblo norteamericano para que se desate un bloqueo tan feroz durante ya más de 50 años y que ha mantenido no solamente alejados sino casi desconocidos a dos países tan cercanos geográfica, social, cultural e históricamente?"

Fue entonces cuando Cremata, además de hablar de su experiencia como familiar de una víctima del terrorismo, se refirió a las trabas interpuestas por sucesivas administraciones de la Casa Blanca al libre intercambio entre EE.UU. y Cuba.

Moore indagó en la audiencia si alguien conocía algo sobre la voladura del avión cubano y de la presencia y vida pública de Bosch y Posada en Miami. El silencio fue sepulcral, pero respetuoso. De ello no se habla en los grandes medios de un país que blasona el liderazgo de una cruzada antiterrorista en el mundo e invade lejanos países bajo ese pretexto.

Entonces empezaron a llover las preguntas e intervenciones en una sala repleta de personas queriendo saber más. Y, por supuesto, se habló de cómo se hace cine en Cuba, se vive y crea en una pequeña isla que aún teniendo serios problemas económicos no deja de producir artistas.

Mirtha Ibarra contó sus experiencias como actriz y al lado de su esposo Tomás Gutiérrez Alea (Titón). Rosa María Rovira, de la Dirección de Relaciones Internacionales del ICAIC, ofreció un panorama de nuestra producción cinematográfica, dentro y fuera de la institución, destacando la fuerte presencia del Festival del Nuevo Cine Latinoamericano que se celebra cada año en La Habana, así como del apoyo que se ofrece a los noveles directores, a través de la Muestra de Jóvenes Realizadores, y a la creación con modelos alternativos de producción.

Ian Padrón, por su parte, relató su formación en el ICAIC y la carrera que ha venido desarrollando al margen de la institución, la cual ha contado con el respaldo de la crítica y el público.

La amistosa conversación derivó en una pregunta lanzada desde la audiencia: ¿Cómo puede educarse al público norteamericano para que vea más películas diferentes, de culturas diferentes y en especial, las películas cubanas?

Tomado del periódico Granma

GERARDO, LA FOSA Y EL MERCENARIO

La cruzada mediática contra Cuba alcanza los límites de la fantasía, manipulación informativa y medias verdades, todo sustentado en suposiciones y criterios de cubanólogos que no han pisado territorio nacional en decenas de años, pero que se sienten e$timulados para decir lo que quieren aquellos que pagan.

Ya Eduardo Galeano había dicho que a Cuba sus enemigos la miran a través de una lupa, sobredimensionando cualquier hecho que aquí ocurra, como si no hubiera suficientes razones para mirar hacia donde realmente hay flagrantes violaciones de los derechos humanos.

Hace poco un mercenario, campeón olímpico en huelgas de hambre, desarrolló un prolongado ayuno pues quería morirse, suicidarse, en un intento de echar sobre la Revolución Cubana la culpa de su fallecimiento.

No se sabe ahora mismo cuantos artículos, comentarios, entrevistas, opiniones, se publicaron para satanizar al Gobierno de la Isla y magnificar al ¨¨héroe¨¨, que tiene muchos deseos de morirse, pero asegurándose un sitio de honor dentro del ¨¨martirologio¨¨ mercenario.

La hipocresía de esos medios de prensa, especialmente de Europa y Estados Unidos es evidente pues dicen defender los derechos humanos, elevan a la categoría de ¨¨estrella¨¨ a un vividor de la industria del anticastrismo, soslayan la cruel situación del antiterrorista Gerardo Hernández y ocultan al mundo el pavoroso descubrimiento de la fosa con más de dos mil cadáveres en Colombia.

¿Es que dos mil cadáveres hallados en un país, no son suficientes para que esa noticia ocupe los principales titulares de los informativos de todo el mundo?

¿Es que el ayuno del mercenario, probadamente mercenario, tiene más importancia que el descubrimiento en Colombia de esa tumba común con restos de ciudadanos del país sudamericano?

¿Por qué se le oculta al mundo ese hecho de profunda sensibilidad humana y se sobredimensiona hasta el absurdo, el ayuno del mercenario?

¿Por qué la prensa occidental y la Unión Europea, escandalizadas ante la huelga de hambre del mercenario, no se manifiestan y condenan a Estados Unidos por torturar a Gerardo Hernández, un luchador antiterrorista, privándolo de sus derechos como prisionero político en el Imperio?

¿Es que la Unión Europea no se ha enterado de ese abuso que se comete contra Gerardo y prefiere mirar para Los Alpes?

En el caso de Gerardo se cometen otras violaciones que debieran ser atendidas por Amnistía Internacional y todas esas instituciones que se dedican en el mundo a auscultar el respeto a los derechos humanos.

¿Será que en este mundo unipolar los hombres dignos tienen que bajar la cabeza ante la prepotencia, y el abuso del Imperio y sus seguidores europeos?

¿Por qué el diario español El País no le ha dedicado una línea a Gerardo Hernández Nordelo, siendo este un hombre que combatió el terrorismo desde la misma entraña de la mafia de Miami?

¿Por qué los Gobiernos de Europa no han condenado la violación a la que es sometido el antiterrorista cubano?

¿Por qué le abren sus páginas a los mercenarios de la Isla para que destilen todo su odio contra la Revolución Cubana, sostenida por la inmensa mayoría de la población?

Evidentemente hay una enorme dosis de hipocresía en la posición de la prensa y los Gobiernos del Viejo Continente en relación con Cuba, que sufre el criminal bloqueo norteamericano, que afecta directamente a la población de la Isla.

Gerardo Hernández no ha podido ser doblegado por sus carceleros, desde la celda que es el hueco, reducido espacio al que ha sido confinado de manera criminal e injusta, seguirá con la estrella en la frente, donde la llevan los hombres y mujeres dignos de la Tierra.

VENGANZA CONTRA GERARDO HERNANDEZ, LUCHADOR ANTITERRORISTA

Hay un cubano que en este momento se encuentra castigado en una prisión de máxima seguridad en Estados Unidos, sin saber la causa por la que lo han llevado al hueco de los huecos, un acto de cruel tortura por ser un luchador antiterrorista.

Cuando hasta hace poco un mercenario cubano quiso suicidarse con una huelga de hambre, fueron miles las informaciones, comentarios, vaticinios y condenas al gobierno de la Isla, por no hacer lo necesario para salvar la vida del asalariado de la Oficina de Intereses de Estados Unidos en La Habana.

Al final el suicida no lo logró su objetivo, que era morirse, pero los gobiernos de la Unión Europea levantaron sus voces para satanizar a la Isla por supuestas violaciones de derechos humanos.

Ahora, esos mismos gobiernos de la culta Europa guardan silencio cómplice ante la arbitrariedad que se comete contra un hombre cuyo delito es luchar contra el terrorismo, flagelo que dicen ellos combatir, pero los hechos demuestran lo contrario.

Gerardo Hernández y sus cuatro compañeros que desde hace doce años guardan injusta prisión en cárceles de Estados Unidos, no por espiar al gobierno de ese país, sino infiltrados en los grupos terroristas de la mafia de Miami, son victimas de la venganza del gobierno norteamericano contra la Isla./

Hoy Gerardo está enfermo, aislado, sin derecho a tomar el sol y prácticamente enterrado en el hueco, en medio de un calor infernal, sometido a la tortura psicológica que ello supone, debido a una decisión del Buró Federal de Investigaciones.

Revisando la prensa internacional, europea y norteamericana se evidencia un silencio absoluto ante las precarias condiciones que sufre Gerardo. No se ha escuchado la voz de ninguno de los periodistas estrella de los diarios condenando esa violación contra el Héroe Cubano.

Los medios de prensa que dedicaron grandes espacios para reflejar el intento de suicidio del mercenario, no se han enterado de la crueldad que sufre Gerardo Hernández Nordelo, un hombre digno, íntegro, amante de la paz y la libertad.

El pueblo de Cuba, que jamás ha abandonado a sus hijos en ninguna circunstancia, reclama al Gobierno de Estados Unidos la liberación inmediata de los Cinco Héroes Cubanos, que desde hace doce años están en cárceles de ese país, por luchar contra el terrorismo.

Mientras, por las calles de Miami anda una bestia de apellido Posada, asesino, torturador, autor del sabotaje al avión cubano en Barbados, donde murieron 73 personas.

Obama lo protege al mismo tiempo que se ensaña contra uno de los hombres mas dignos del mundo, cuyo delito ha sido combatir desde las entrañas de la mafia de Miami, el terrorismo contra Cuba.