Estamos
en la Jornada por el Día de la Prensa
Cubana y en este gremio hemos tenido a mujeres excepcionales, que con la
belleza de su pluma han engrandecido a nuestro país.
Una
de ellas sigue siendo una de las figuras más dulces y dignas de esta profesión,
con un legado que con el paso de los años cobra más vigencia dada la calidad de
sus obras.
Se
trata de una mujer que hace 23 años nos dejo atónitos aquel día en el que junto
a otros valiosos compañeros partió hacia la eternidad, dejándonos en el más
absoluto desamparo.
Su
bello rostro presidio no pocas acciones de la prensa granmense, y su verbo filoso
y su pluma en ristre, se erigieron en pilares de una profesión como la nuestra,
en la que se unen el látigo y el cascabel.
Siempre
quise escribir sobre ella, mas, en estos últimos años, esa necesidad se ha ido
incrementando porque digo que hoy su manera de ver la vida, su impronta para
evaluar acontecimientos nos hace mucha falta.
La
amiga, esa entrañable persona capaz de reseñar en pocas cuartillas la maestría
de un espectáculo o hacernos ver los detalles negativos de una presentación
cultural tiene un nombre: Dania Casali Ramírez.
Hija
de una familia respetable de Bayamo, ella se inclino por las letras no para
esclavizarlas encadenándolas a lo estéril, vacío, frívolo, todo lo contrario
para situarlas en el sitio exacto que las hiciera útiles.
Y
asi anduvo con sus poemas subiendo las montañas, atravesando los llanos de la
provincia, cruzando sus ríos y arroyos, alimentando con su presencia la
fragancia de las flores, que le envidiaban su lozanía.
Dania
era capaz de reportar de cualquier aspecto de la vida social, tenía una
capacidad de trabajo que la hacía destacar entre sus colegas, quienes le
profesaban el respeto a quien le indicaba el camino de lo cierto.
Hoy
es el Día de la Prensa Cubana y mañana Dania estaría cumpliendo años por lo que
es merecido este homenaje que desde la radio le hago, sabedor de que ella
merece todos los reconocimientos posibles.
Muchas
veces coincidí con ella en eventos culturales y era de esas personas a las que
se le podía preguntar, consultar, respondiendo en todos los casos con su
hermosa sonrisa de ser humano noble y solidario.
Aquel
día de julio de un año que prefiero no recordar se detuvo el verbo, la musa
alzo muy alto su vuelo y su rostro comenzó a dibujarse en el firmamento desde
donde brilla como el sol, cada mañana.
Había
nacido el 15 de marzo de 1961 en Bayamo. Hoy estaría cumpliendo 53 años.
Cruel
la vida que nos arrebato a una periodista aguda, temeraria, tierna y definitivamente
hermosa como Dania Casali Ramirez.