Si la causa del terrorismo en el mundo hubiera sido la existencia de Osama Bin Laden, entones, con su muerte habrá desaparecido ese flagelo.
Resulta que desde antes de nacer Bin Laden, ya el mundo había observado actos terroristas con la terrible secuela de muerte y destrucción.
La humanidad guarda en sus memorias, aquellas explosiones en Hiroshima y Nagasaki. Un Japón agotado llegaba al final de la Segunda Guerra Mundial. El ataque a Pearl Harbor fue el pretexto para utilizar por primera vez las armas atómicas.
Miles y miles de personas fallecieron por ese desmedido ataque norteamericano contra el pueblo japonés. Fue sin duda, un acto terrorista por parte de Washington que sirvió para decir a todos los gobierno, de lo que era capaz de hacer.
Y que fue aquella intervención yanqui en la Guatemala de Jacobo Arbenz, cuando como presidente de ese país, este cometió el ¨¨delito¨¨ de realizar una reforma agraria en 1954.
Cómo calificar la instauración de regímenes dictatoriales en América Latina, durante los cuales miles de hombres y mujeres fueron torturados, desaparecidos o asesinados, poniendo en prácticas las técnicas enseñadas por asesores de Estados Unidos?
Quien apoyó a Duvalier en Haití. A Trujillo en República Dominicana. A Somoza en Nicaragua. A Batista en Cuba. A los represivos gobiernos de Chile, Argentina, Uruguay, Brasil de aquellos oscuros años?
Cuántos habrán dejado la vida en los calabozos, caminos, bosques, rios y mares de Nuestra América, salvajemente reprimidos?
Quien puede negar el carácter terrorista de aquel memorando, recién alcanzado el triunfo revolucionario en Cuba, que expresaba la necesidad de propiciar hambre y enfermedades para que el pueblo de la Isla se levantara contra el Gobierno Revolucionario?
Esa nota se redactó en Washington, estando aun como presidente el antecesor de Kennedy, bajo cuya administración se produjo la criminal agresión de los mercenarios por Playa Girón.
Quien los preparó, quien los transportó hasta las costas de la Isla desde Centroamérica? El Gobierno de Estados Unidos.
Y esa agresión fue o no un acto terrorista? La Organización de Naciones Unidas condenó a ese gobierno en aquel momento?
El terrorismo puede estar acompañado por las armas o por acciones aparentemente inofensivas como es el bloqueo que mantiene Washington contra el pueblo cubano desde hace medio siglo.
Cuánto daño ha provocado el bloqueo a la Isla , no solo desde el punto de vista económico, sino en el campo humano, porque no se puede olvidar la negativa yanqui de permitir la venta de equipos médicos a Cuba, especialmente medicinas para combatir el cáncer en los niños que padecen esa enfermedad?
Puede considerarse un acto terrorista aquel que un día cometió el Gobierno de Estados Unidos, en medio de la epidemia de dengue, virus introducido por un elemento contrarrevolucionario procedente de Miami?
Aquel fue un momento muy triste pues murieron 151 personas, entre ellas 101 niños!!! Cuando los medicamentos necesarios para salvarles la vida estaban a solo 90 millas de nuestras costas, pero una vez más Washington se negó a propiciar la venta de los mismos.
Conrado Benítez García, Manuel Ascunce Doménech, Pedro Lantigua, Delfín Sen Cedré, fueron asesinados por los terroristas integrantes de las bandas contrarrevolucionarias en El Escambray, organizadas, financiadas y alimentadas por la Agencia Central de Inteligencia de Estados Unidos.
El terrorismo existía antes de Osama Bin Laden. El terrorismo sigue vigente hoy en Irak, Afganistán y en Libia.
Estados Unidos que pretende convencer a la humanidad de que preside la cruzada contra ese flagelo, protege, alimenta y alienta a otros terroristas confesos que viven plácidamente en Miami, gozosos de sus fechorías contra el pueblo de Cuba.
Están allí estos asesinos, mientras en cinco prisiones diferentes, cinco jóvenes patriotas cubanos cumplen inmerecidas condenas por luchar, precisamente contra el terrorismo.
El Premio Nobel de la Paz , otorgado al Presidente de la Guerra , Barack Obama, debieron entregárselo a ellos, que lo merecen pues impidieron muertes de cubanos y norteamericanos en una lucha directa contra los terroristas que han enlutado al pueblo de Cuba.
Con la muerte de Bin Laden no ha desaparecido el terrorismo, tendría que morir el sistema que engendró al lider de Al Qaeda en las mismísimas oficinas de la CIA en Langley, Virginia.