Cualquier
proyecto cultural, además de estar elaborado por ideas que justifiquen su
realización, necesita de un líder que dirija las acciones con el objetivo de
plasmarlo de manera coherente y eficiente.
Ese
líder, con capacidad para aglutinar los intereses de ese proyecto cultural,
tiene, además, la responsabilidad de darle vida y ahí la pasión, el amor por la
obra, toma entonces las dimensiones de la realidad.
También
se necesita de una alta dosis de sentido de pertenencia, de ese sentimiento que
impulsa también en el afán para lograr los objetivos propuestos, por ejemplo,
la integración del público a la idea original.
Es
en ese punto donde podemos catalogar de exitoso el empeño de ese líder, cuando ese
público responde a la convocatoria sustentada en la opción cultural que
propone.
Para
orgullo de Bayamo y de la provincia de Granma hay un proyecto cultural que está
insertado entre los programas de la Uneac que hoy día puede considerarse como
el más exitoso de todos.
Ese
espacio, eminentemente musical, lo encabeza un artista de reconocidos méritos,
y el que desconoce la palabra cansancio cuando esta parece querer aflorar.
Con
artistas como él la cultura está garantizada para las actuales y futuras
generaciones de bayameses que asisten y asistirán a las presentaciones que
organiza bajo el denominador común del bolero.
Quizás
los oyentes han podido identificar a ese coloso, sí, coloso que ha sabido
llevar las riendas de esa Peña del Bolero que cada primer jueves del mes se
desarrolla en los jardines de la Uneac de Bayamo.
Él
no urge de elogios, no necesita de reconocimientos ni de palmaditas en el
hombro, todo lo que ha logrado en ese espacio ha sido con mucho sacrificio y al
final de cada presentación ya está organizando la próxima.
Orlando
Quesada Arévalo, Guapachá, es de esos seres humanos que vive para la música y
los músicos, cada día se despierta con alguna melodía, con alguna letra, fruto
de sus vivencias, de su cotidiano andar bayamés.
Tiene
una gran empatía con los artistas, músicos especialmente, a los que invita a la
peña sabiendo ellos que no habrá compensación económica alguna, salvo el
aplauso del respetable público presente.
Contar
con un líder cultural de esta estirpe, demuestra que se puede lograr el
propósito de dar a conocer a los nuevos valores de la canción bayamesa y
granmense teniendo como base el difícil género del bolero.
Ese
es el empeño de Orlando Quesada Arévalo, Guapachá, poner en alto ese
sentimiento colmado de ternura que es el bolero en la memoria popular, para que
no muera hoy y mucho menos mañana.