El Centro de Investigaciones Médico-Quirúrgicas (CIMEQ) en la capital, ha realizado 300 trasplantes renales con resultados notables, desde que comenzó el complejo proceder hace 25 años.
De ese total, dos de ellos combinados hígado-riñón y siete de páncreas-riñón, anunció el doctor Anselmo Abdo Cuza, coordinador de esta especialidad, en la referida institución.
Entre los expertos que destacan en esos injertos sobresalen el profesor y cirujano Oscar Suárez Savio, pionero de la especialidad en Cuba, quien en 1970, junto a un equipo multidisciplinario, dirigido por el Doctor Abelardo Buch, efectuaron el primer trasplante renal en el Instituto de Nefrología.
Luego de este momento significativo en la historia de la medicina, la actividad de trasplante de órganos en la ínsula ha alcanzado prestigio a escala internacional y ya acumula más de cuatro mil 800 de riñón, de ellos un centenar en niños, explicó a la AIN el doctor Alexander Mármol, coordinador nacional de Trasplante Renal, del Ministerio de Salud Pública.
Actualmente más de dos mil 500 cubanos viven con riñón artificial por la insuficiencia renal crónica, enfermedad que según estadísticas de la Organización Mundial de la Salud la pueden padecer hasta 600 millones de personas, por el aumento acelerado de la diabetes y la hipertensión arterial.
Estas dolencias constituyen grave problema de salud, del cual Cuba no está exenta, y para revertir esa situación se llevan a cabo acciones de prevención desde la atención primaria de salud.
Está demostrado internacionalmente que el trasplante renal es tres veces más económico que mantener al enfermo en diálisis, pues según estudio realizado en Cuba por cada paciente con tratamiento dialítico, se gastan 20 mil dólares anualmente, incluido el consumo de agua, electricidad y el traslado.
El programa cubano de trasplante renal garantiza los servicios a todos los necesitados, de forma gratuita, a pesar de las limitaciones económicas impuestas por el bloqueo de Estados Unidos hace medio siglo y la crisis mundial.
Tomado de la AIN