El
equipo de pelota de Granma, mi preferido, pasa por estos días momentos muy
desagradables y esa situación nada tiene que ver con el pitcheo, bateo, guantes
o pelotas.
Desde
el viernes último varios integrantes de la novena granmense han estado
sufriendo de problemas estomacales, originadas por causas desconocidas hasta el
momento.
Se
supo que había posibilidades de cólera en las causas que llevaron a algunos
miembros del equipo hasta las instalaciones hospitalarias de la capital de
Sancti Spíritus donde recibieron la debida atención.
Pero
la recuperación de cualquier enfermo de enfermedades diarreicas no es
inmediata, ya que la misma conlleva deshidratación de los pacientes que
necesitan de un tiempo prudencial para alcanzar la normalidad.
Resulta
incomprensible que la Comisión Nacional de Baseball, no haya tenido en cuenta
la enfermedad de los peloteros de Granma, para hacer viajar hasta Pinar del Rio
al resto del equipo aparentemente sano.
Algo
irracional también fue la decisión de enviar al occidente del país a los cinco
dados de alta el sábado, cuando ya se sabía que no jugarían en la serie pactada
a tres juegos, en lugar de enviarlos hacia Granma.
En
este sentido la CNB puso el espectáculo por encima de la salud de los
peloteros, pudiendo suspender la serie en Pinar del Río para una ocasión más
propicia.
Y si
la situación originada en Sancti Spiritus no fue tenida en cuenta por la sacrosanta
e intocable CNB, mas contradictoria resulta la presión ejercida para que el
cotejo previsto para el lunes se desarrollara entre Granma y Pinar.
No
se sabe a ciencia cierta que móviles se habrán esgrimido por los decisores de
la pelota cubana para desdeñar un asunto de salud y exponer a los jugadores a
mayores dificultades.
Parece
que la CNB no tiene clara la situación del país ni los esfuerzos que este hace
para enfrentar la compleja realidad higiénico-sanitaria, a la que el Estado
Cubano le asigna cuantiosos recursos.
Si
alguna duda flotaba en el ambiente, luego de los sucesos de Sancti Spiritus, la
misma se despeja porque el problema ha persistido este domingo con el ingreso,
ya en Pinar, de otros integrantes del conjunto.
En el
juego del domingo los peloteros granmenses que salieron a defender los colores
de la provincia, cayeron heroicamente una carrera por cero ante la poderosa
escuadra vueltabajera.
Todo
eso jugando con la ausencia de figuras claves de nuestro equipo por lo que lo
realizado en el terreno, aunque se perdió, merece la felicitación de todos.
Otro
detalle: resulta raro, extraño que en las transmisiones de la radio y la televisión
de este sábado y domingo, ninguno de los narradores se refiriera al problema,
latente y digno de tocarse.
Lo
ocurrido puede repetirse con otros conjuntos de la actual serie 54 de la pelota
cubana, ojala que de producirse, además de lamentarse, la Comisión Nacional de
Béisbol, actúa con rapidez y raciocinio.